¿Te has fijado que hay relojes que han pertenecido a tu padre o que le regalaron hace muchos años y que siguen siendo totalmente vigentes? Tal vez la forma de su esfera no sea tendencia, pero siguen siendo elegantes y quedan bien prácticamente con cualquier prenda y en todas las ocasiones. ¿Por qué es así y no sucede con otros relojes que no son baratos pero que se pasan de moda rápidamente?
Cuando apuestas por marcas clásicas, en el sentido de que son marcas con experiencia y que fabrican buenas piezas, la calidad es la seña de identidad. Esta calidad se deja ver en todo lo que rodea al reloj: sus materiales, su estuche, sus acabados y, por supuesto, también en su diseño.
Si vas a una joyería a comprar Relojes Hamilton en Vigo, por nombrar a una de estar marcas que todos conocemos, te encontrarás con que sus colecciones hacen concesiones a las tendencias actuales, pero que tienen un toque clásico y de alta calidad que hace que se vea, incluso ya ahora, que ese reloj no va a quedarse anticuado nunca. Dejará de ser un diseño moderno para pasar a ser uno clásico, pero nunca será algo desactualizado que tengas que guardar en un cajón.
Hamilton comenzó siendo una marca estadounidense. Pronto se convirtió en un referente en ese país, lo que hizo que sus relojes comenzaran a ser los elegidos para lucirse en las muñecas de los actores y actrices en las películas de éxito. Pero el corazón de estos relojes estaba claramente influido por la forma de trabajar de los suizos. De hecho, en 1974 la marca pasa a formar parte de Swatch Group, uno de los más potentes grupos de relojeros suizos y en el 2003 se traslada toda la producción a Suiza de manera definitiva.
Su seña de identidad sigue siendo el estilo con aire americano, pero con un corazón puramente suizo y sus modelos antiguos, incluso los más sencillos y de gama más básica, siguen vendiéndose en webs de coleccionistas porque son muy bonitos y mucha gente aprecia sus formas.
Esta es la diferencia entre un reloj de calidad y uno normal, mientras que el segundo acabará en un cajón y perderá valor cada año que pase, los de calidad podrás lucirlos siempre que quieras e incluso algunos modelos se revalorizarán. En cualquier caso, siempre tendrás un buen mercado para ellos.