Por qué el kilometraje es tan importante en renting

Los kilómetros influyen no sólo en el día a día de millones de conductores, sino también en el cálculo de las cuotas de Renting coches para autonomos. Y es que las cláusulas de este contrato no contemplan únicamente la duración del alquiler, el modelo y la marca elegidos o las prestaciones, servicios y garantías incluidas.

 

Para calcular el precio final de las cuotas de renting, los clientes deben estimar el número de kilómetros que recorrerán durante el periodo de contratación del vehículo. Si la duración del contrato es de 3 años, entonces los interesados necesitan saber cuántos kilómetros realizan al mes y multiplicar el resultado por 36, para así determinar el kilometraje en el que se basará el cálculo de las cuotas.

 

Sin embargo, es frecuente que los clientes estimen a la baja el número de kilómetros que recorrerán a bordo del vehículo de renting. ¿Reciben una sanción económica por parte de la empresa de renting? La respuesta es sí, pero su cuantía puede ser insignificante dependiendo de las cláusulas y condiciones pactadas por la compañía.

 

Por lo general, estas empresas aplican un sobrecargo por kilómetro excedido, en un sistema similar al de las horas del sector hotelero. Por ejemplo, si por cada kilómetro recorrido de más se aplica un sobrecargo de 0,045 euros, los clientes que acumularan un extra de 3.000 kilómetros en su vehículo, deberán afrontar el pago de 135 euros.

 

¿Y en caso contrario? La empresa de renting devuelve al cliente la cantidad correspondiente a cada kilómetro facturado de más en las cuotas, y rara vez son generosas en este sentido. Veamos otro ejemplo: si la devolución de cada kilómetro extra asciende a 0,029, los clientes que hayan realizado 4.000 kilómetros menos de los pactados en el contrato de renting, recibirán un pago de 116 euros.

 

Como es evidente, los conductores deberán cuidarse de sobrepasar el kilometraje estimado en el contrato de renting, por la desigual relación entre los sobrecargos y las devoluciones en este mercado.

Sabor bajo cero: 5 razones para consumir la cebolla congelada

Pocos ingredientes son tan propios y necesarios en la gastronomía española como la cebolla. Por más que nos hagan llorar, estas hortalizas no sólo dan sabor a las comidas, sino que suponen un ingente aporte de vitaminas y minerales, muchas de las cuales poseen beneficios medicinales: digestivos, antioxidantes, cardiosaludables, diuréticos, prebióticos, etcétera.

 

Que exista una fuerte demanda de Proveedor de cebolla congelada demuestra que las formas de conservar y de ingerir esta hortaliza están cambiando, y para bien. Una de las razones más evidentes para congelar cebollas es la durabilidad. En efecto, las bajas temperaturas contribuyen a preservar la apariencia, el sabor y los valores nutricionales de estas verduras.

 

Elegir cebollas congeladas en lugar de frescas conlleva un ahorro de tiempo y de molestias, indispensable en una sociedad tan ajetreada como la actual. Las cebollas comercializadas suelen estar troceadas, para que el consumidor deba únicamente abrir el envase, descongelar la porción deseada y verterla en la sartén.

 

De hecho, las cebollas que se adquieren cortadas contribuyen al aprovechamiento de los alimentos, un serio problema en los países europeos, donde cada año se desperdician toneladas de ellos. Y es que el consumidor puede elegir qué cantidad descongelar, en lugar de dividir en dos, tres o cuatro partes una cebolla, cada de las cuales se oxidará con el paso de las horas y perderá gran parte de sus propiedades.

 

Precisamente, la congelación de esta hortaliza garantiza que su contenido en nutrientes y minerales se mantendrá intacto con el paso del tiempo. Las cebollas congeladas no son alimentos procesados, sino que permanecen sin cambios (aditivos, saborizantes, conservantes, etcétera) desde su cosecha. En otras palabras, son cebollas iguales a las frescas, pero mucho más duraderas.

 

Con esta y otras hortalizas congeladas, los consumidores ganan en confort, ya que les ahorra la tarea de limpiarlas y lavarlas, lidiar con plagas molestas o incluso desechar algunas piezas por encontrarse en mal estado. Estas molestias brillan por su ausencia en los envases de cebolla congelada.

¿Conoces los parkings baratos del aeropuerto de Madrid?

Ir al aeropuerto de Madrid en tu propio coche, dejarlo a buen recaudo mientras estás de viaje independientemente de lo largo que este sea y recogerlo al volver para llegar a casa sin esperas ni agobios es posible. Sí, pensarás, siempre ha sido posible dejar el coche en el Parking aeropuerto en Madrid, el problema es la factura al volver. Pues retomemos y rectifiquemos, es posible… y a un precio increíblemente bajo.

La culpa de este cambio la tenemos que buscar en los parkings baratos que llevan años trabajando cerca de los principales aeropuertos de las ciudades españolas. Un servicio que, como se ha demostrado, tiene una amplísima demanda y era más que necesario. Su funcionamiento es tan sencillo que no nos explicamos como no lo había pensado nadie antes y como no son mucho más conocidos.

Cuando se tienen los billetes de avión para un viaje, el cliente solo tiene que llamar al parking para hacer una reserva. La hará por los días que tiene que desplazarse, pero si se producen cambios en el viaje, ya sea porque tenga que volver anticipadamente o por quedarse más tiempo, solo tiene que comunicarlo. Es decir, las fechas no son cerradas necesariamente.

El día del viaje, con la anticipación necesaria, el cliente acude con su vehículo al parking barato. Allí puede ver las instalaciones, que suelen ser amplios terrenos cerrados y debidamente vigilados. Podrá ver en dónde va a quedar su coche y no tendrá que preocuparse de que la empresa sea ilegal o carezca realmente de un lugar en el que dejar el vehículo.

Tras esto, el cliente y sus acompañantes son conducidos al aeropuerto, llegando a la hora que deseen para poder realizar el embarque y/o la facturación. Quedarán en la misma puerta de la terminal. La comodidad es absolutamente máxima.

El día de la vuelta, un empleado del parking estará esperándoles para recogerlos y hacer entrega del vehículo, de forma que puedan volver a casa tranquilamente y sin esperas. Tanto es así, que estas empresas se ocupan de estar al tanto si hay cambios en la hora del vuelo para estar siempre a tiempo. Si se ha pactado así o si se cuenta con una promoción, el vehículo se entregará lavado y desinfectado.

Y lo mejor, es que el precio es sorprendentemente bueno, haciendo que, sin duda, merezca la pena ir al aeropuerto en el propio vehículo.