Por qué tienen tanto éxito la repostería asturiana

La reposteria asturiana típica tiene mucho éxito más allá de las fronteras del principado. Muchos de sus postres son ya tan típicos en todas las casas que se pueden considerar un poco de todos los españoles. Un buen ejemplo es el típico arroz con leche asturiano, que tanto gusta por su particular textura, ligeramente espesa, y por su gusto tan agradable. Puede ser con costra de azúcar quemado o no, según la zona y también según la pericia el cocinero para darle ese toque especial de algunas casas.

El arroz con leche es un plato nutritivo, delicioso y que se realiza con uno de los productos estrella de Asturias, la leche. Y tan conscientes son de su éxito en Asturias que incluso alguna marca de leche asturiana de calidad se atreve a crear un arroz con leche envasado que puede competir con el que se hace en muchas casas y que evita tener que estar pendientes de la olla durante largo tiempo. Además, es perfecto para llevar en el bolso y darles a los niños en cualquier merienda, sabiendo que a ellos les encanta pero que además les va a alimentar debidamente.

Otro plato típico de las sobremesas asturianas es la leche frita. De nuevo la leche presente para conseguir los mejores sabores. La leche frita es un postre muy sencillo de realizar, pero es clave que la leche sea de buena calidad y a poder ser entera para que tenga un sabor más intenso y mucho más auténtico. Otra coincidencia con el postre anterior está en la canela, un ingrediente muy típico de la repostería y que combina muy bien con la leche. Podríamos poner también el ejemplo de las natillas, que, sin ser específicamente asturianas, se hacen muy bien en esta zona de España.

Los frixuelos son otro postre típico asturiano muy sabroso. Emparentados con los crepes y con las filloas galletas tienen su propio punto y se cocina con leche, huevo, harina y azúcar. De nuevo la leche, omnipresente en los dulces de esta tierra. Es un postre típico de la época de carnavales, pero hay que reconocer que la globalización también ha llegado a estas cosas y podemos encontrar frixuelos en la mesa en cualquier momento del año. Incluso los podemos encontrar rellenos con crema pastelera, con nata o con unos toques de licor, a gusto de quién los consume.

Los cines en la cuidad olívica

Vigo es principalmente conocida, además de por toda su industria, por las luces de navidad que sorprenden a propios y extraños año tras año. Sin embargo, más allá de estas luces, los Cines en Vigo también cuentan con una gran importancia para todos aquellos que quieran disfrutar un buen rato con una buena película. Basta con echar un vistazo a su cartelera para encontrarnos con una gran variedad de películas, nacionales e internacionales, con las que poder pasar un buen rato.

La importancia de ir al cine

Una de las ventajas que tiene el cine, es la gran variedad de películas que ofrece. Precisamente por este motivo, el cine es un arte del que puede disfrutar todo el mundo y es que, cada día llegan al mercado películas para todos los gustos.

A diferencia de otras aficiones, el gusto por el cine une a las personas. De hecho, es perfectamente posible compartir amor por el cine a pesar de tener gustos completamente diferentes. Películas de miedo, películas de amor, de autor, de acción… si hay algo que nos queda claro del cine es la variedad con la que cuenta, ya que es un arte para disfrutar.

Por si los géneros en el cine no fueran pocos, nos encontramos también con esos actores que dan vida a las películas con su personalidad. El atractivo de algunos de estos es tal, que muchas personas pagan una entrada de cine no porque les atraiga la película en cuestión, sino porque su actor favorito trabaja en esta.

Ni que decir tiene la variedad que existe cuando estos empiezan a trabajar en toda clase de películas. Por todos estos aspectos y muchos más, el cine es considerado por muchos como el séptimo arte, un arte que, a pesar de la dificultad que tiene para compararse con otros monumentos, es un hecho que está dejando un legado con el paso de los años.

3 tareas más importantes de un director de fotografía

El trabajo de un director de fotografía muchas veces no es tan reconocido por el público en general como debería. Pero cuando se hace bien, se nota y mucho. En ocasiones no sabrían reconocer a qué se deben, pero los espectadores salen del cine fascinados por la atmósfera de la película o por lo bien que han podido sentirse dentro de determinadas escenas. Y esto es obra de un buen director de fotografía, como el que puede llegar a ser una persona que curse un Master dirección de fotografía Madrid. Veamos cuales serían los aspectos más importantes de su trabajo:

-La iluminación. La iluminación es fundamental para cualquier imagen. Si se está filmando una imagen que transcurre durante el mediodía la intensidad de la luz del sol tiene que corresponderse y no puede variar. Es decir, si se realizan varias tomas y planos todos ellos tienen que ser en el mismo momento y en idénticas condiciones de luz. Y esto es algo de lo que se debe de asegurar el director de fotografía. Por eso, tendrá un papel relevante a la hora de decidir en qué lugares se realizarán las diferentes tomas y los horarios. Pero también es importante que toda la película refleje una atmósfera muy concreta y es algo que también será responsabilidad suya en lo que se refiere a la iluminación.

-La composición de la escena. El director de fotografía podrá tomar decisiones respecto a qué elementos formarán parte de las diferentes escenas y cómo se realizan los planos. Esto tiene que ver con conceptos tan importantes como la paleta de colores que se va a usar en la película y que también deberán tener en cuenta los responsables del vestuario y de seleccionar exteriores o realizar decorados de interiores.

– El etalonaje. Esta es una de las funciones más desconocidas por parte de la mayoría de las personas que disfrutan del cine, pero que, sin saberlo, les dan ese toque tan personal a algunas de sus películas favoritas. Hablábamos antes de la paleta de colores de la película, que debe de mantenerse estable a lo largo de la misma. Pero pueden existir paletas determinadas incluso para personajes concretos y hay que cuadrarlo todo para que cada escena tenga sentido, mantenga su luz y esté en consonancia con los parámetros de la película o del personaje a lo largo de todo el metraje. Un trabajo muy meticuloso que realiza siempre el director de fotografía y para lo cual necesita mucha formación técnica y experiencia.