¿Qué es y para qué sirve el tricograma capilar?

Para el cuidado del cuero cabelludo y el tratamiento de sus enfermedades, es indispensable contar con la ayuda de un experto dermatologo pelo en Vigo. Estos profesionales se sirven de distintas pruebas médicas (dermatoscopia, tricoscopia, etcétera) para evaluar la salud del cabello y de la piel en contacto con el mismo.

En concreto, uno de los procedimientos más empleados en esta especialidad es el tricograma capilar. Consiste en estudiar a través del microscopio óptico una muestra de cabello, para obtener información precisa acerca de su estado en relación con la alopecia y otras alteraciones.

Por lo común, el tricograma requiere la extracción previa de unos cincuenta capilares del área afectada por la enfermedad. La observación de dichos capilares cuenta una ‘historia’ reveladora acerca de las causas que motivan la rarefacción. La prueba del tricograma capilar arroja información útil en distintos tipos de alopecia, como la difusa, la androgénica, la areata o la cicatricial.

Ahondando más en el proceso, el tricograma capilar se inicia con la preparación del pelo y del cuero cabelludo. Tras una limpieza en profundidad, se toman las muestras practicando un corte en la raíz (por tracción), sin deteriorar el tallo piloso ni ocasionar dolor al paciente, aunque sí pequeñas molestias.

Seguidamente, se somete la muestra a un examen microscópico: se colocan en una lámina transparente y comprueba exhaustivamente el estado de los bulbos pilosos y las raíces, en busca de cualquier alteración que arroje luz sobre el factor causante de la alopecia: el tamaño, el grosor, la forma, etcétera.

Obtenidos los resultados, el especialista procederá a comunicar al paciente cuál es el problema capilar detrás de su alopecia. En ocasiones, la rarefacción del cabello no guarda relación con la calvicie común, sino que está motivada por la acción de hongos, microorganismos y otros agentes maliciosos.